La popular y legendaria banda de rock mexicano liderada por Saúl Hernández, se presento exitosamente en el majestuoso Nokia Theatre L.A. LIVE de Los Ángeles, California.
Al inicio del concierto de Caifanes que duro más de dos horas y ante más de siete mil asistentes, se leía en las enormes pantallas “Hola LA por favor no uses ni permitas que nadie use flash. Le hace mucho daño a Alejandro Marcovich”.
“Hola raza. Este día se estará impregnando otro tatuaje en nuestra alma por estar de nuevo con ustedes”, declaró un emocionado Saúl Hernández en su primera intervención de varias, en donde aderezó con su característica filosofía antes de empezar a entonar algunas de sus canciones.
En otra parte, reconoció a la comunidad inmigrante a la que dijo “día con día están haciendo historia y ahora que se habla de una reforma migratoria sabemos que la auténtica será cuando se les otorgue justicia y respeto”.
“Ustedes se han partido el alma. Ningún ser humano es ilegal y aunque no les guste ustedes están y siguen haciendo historia en este país”, añadió Hernández, quien se presentó con su característica melena y presencia física.
En el público, en que el que predominó la comunidad latina, se observaron diversas generaciones de seguidores y hasta un rockerito de dos años llevado por sus padres que bailaba en los pasillos algunos de los temas y se veía que lo disfrutaba en grande.
La piel se enchinaba cuando el auditorio cantaba la mayoría de sus éxitos y a ratos hasta Hernández lo dejaba solo al tiempo que disfrutaba ver esa entrega de sus seguidores.
Entre sus éxitos se escucharon “Mátenme porque me muero”, “Nubes”, “La célula que explota”, “Afuera”, “Ayer me dijo un ave”, “No dejes que”, “Los dioses ocultos” y “Para que no digas que no pienso en ti”, entre otras.
La banda antes de terminar con su más grande éxito “La negra Tomasa” se despidió y dejó como fondo “Imagina”, de John Lennon, al tiempo que se quedó por un rato más para saludar a los fans, tomarse fotos y dar autógrafos.