Hay cantantes que han probado el lado malo de la fama. Drogas, sexo y escándalos eran parte de su vida diaria hasta que algo los hizo recapacitar y ahora procuran ser buenas personas. ¿Qué los hizo dejar el mal camino?
Yuri
Aunque era una de las estrellas más importantes en México a finales de los 80 y principios de los 90, Yuri vivía deprimida y preocupada por perder su fama. En ese momento, la cantante sólo encontró refugio en las drogas y el sexo, adicciones que sólo la lastimaban.
Después de una época oscura, la intérprete de “Invencible” se volvió cristiana y se recuperó a través de la religión. Ahora, sigue siendo una de las estrellas más reconocidas y vive una vida plena al lado de su esposo Rodrigo Espinoza, con quien está casada desde 1995 y su pequeña Camila, a quien adoptó.
Janet Jackson
Aunque la hermana de Michael Jackson nunca ha sido relacionada con el consumo de drogas, sí ha sido protagonista de varios escándalos debido a su ropa provocativa. De hecho, nadie olvidará nunca cuando, en pleno show del medio tiempo del Super Bowl, mostró su seno durante el espectáculo que dio al lado de Justin Timberlake.
Lo sorprendente es que ahora, durante su nueva gira, la intérprete ha optado por dejar de mostrar su cuerpo, usando un vestuario mucho más recatado. ¿El motivo? Su decisión de convertirse al Islam, religión de su esposo, Wissam Al Mana.
Pablo Montero
Por todos es conocido el pasado de Pablo Montero quien incluso estuvo en la cárcel en Estados Unidos por culpa de su adicción a la cocaína. En 2007, el intérprete fue detenido en Miami por conducir a alta velocidad. Al inspeccionarlo, la policía encontró droga, por lo que un juez ordenó su rehabilitación.
Él mismo ha contado que tuvo varias recaídas antes de superar su problema, pero fue gracias a su familia y el cariño del público que pudo salir adelante y mantenerse limpio hasta ahora.
Alejandra Guzmán
Ser hija de Silvia Pinal y Enrique Guzmán no fue fácil para Alejandra, quien en su juventud luchaba por superar el nombre de sus famosos padres para hacerse de uno propio. Eso, el cáncer de mama que le detectaron y la pérdida de un bebé que esperaba la deprimieron al grado de ser dependiente del alcohol y las drogas durante mucho tiempo.
Ella misma ha contado en diversas entrevistas cómo tuvo que tocar fondo quedarse sola para darse cuenta del error que cometía, no sólo por ella, sino también por su hija Frida Sofía quien, en ese entonces, era sólo una adolescente.
“La Reina del Rock” cuenta que le pidió ayuda a su hermano para que la internara en una clínica de rehabilitación y así, renacer.