Luego de dos días de homenaje en la Ciudad de México, las cenizas de Juan Gabriel han regresado a Ciudad Juárez, Chihuahua, en donde ya se encuentran colocadas en la chimenea de la que fuera su casa, justo en donde él deseaba estar.
El pasado martes por la noche, la carroza fúnebre transportó los restos del intérprete hasta el aeropuerto, en donde ya lo esperaba un avión de la Fuerza Aérea Mexicana para llevarlo a la ciudad que lo vio nacer como artista.
Ahí, la gente volvió a salir a las calles para ver pasar al “Divo de Juárez” por última vez. Después, la familia de Juanga cumplió su último deseo y lo colocó sobre la chimenea, junto con una foto de él y la de su madre, misma que el cantautor siempre llevaba consigo durante sus giras.
Se estima que más de 700 mil personas acudieron al Palacio de Bellas Artes para darle el último adiós al michoacano, cuyas cenizas estuvieron en el lugar durante 30 horas para que sus fanáticos pudieran estar cerca de él.
En ese tiempo, varios artistas homenajearon al cantante interpretando sus temas, los cuales fueron coreados por las personas que acudieron a la cita, aun de madrugada y cuando la lluvia amenazó con no detenerse durante las primeras horas del evento.
Por otro lado, los hijos del cantante han enviado un comunicado en el que agradecen todas las atenciones del gobierno mexicano para honrar la memoria de su padre, así como a sus fans, quienes le dieron vida al homenaje.
